El "Pasto Cubano" -científicamente denominado Tithonia tubaeformis- es una maleza introducida cuyo centro de origen es Centroamérica. Esto contó a LA GACETA Rural, Jorge Palacios, ex profesor de Fruticultura de la Facultad de Agronomía de la UNT y de Agronomía y Agroindustrias de la Universidad de Santiago del Estero. Agregó que la plaga ya se asentó en banquinas de rutas nacionales, provinciales, de caminos internos y en tierras abandonadas; dijo que puede vérselo a ambos costados de los caminos, en forma de masas oscuras de gran altura que encierran la senda, como un paredón.

Palacios explicó que las semillas germinan con facilidad en terrenos soleados y que, como no acepta la sombra de los montes, invade fincas o tierras abandonadas sin árboles. Llega hasta los cinco metros de altura. Según el experto, muestra hojas verde oscuro grandes, lámina triangular-ovadas, densamente pubescente, por lo que es suave al tacto. Hospeda insectos y enfermedades, como la Roya.

Sus flores -como un pequeño girasol- son vistosas y atractivas. Según estudios de la Universidad de Santiago del Estero, una planta produce un promedio de 500 flores. Cada flor puede diseminar 40 semillas; es decir, 20.000 semillas.

La semilla se dispersa por viento, agua de riego, segadoras y rastras, entre otros. Se distribuyen con facilidad a gran distancia y se mantienen activas varios meses a la espera de altas temperaturas y suficientes lluvias. La planta ya está en Salta, en Jujuy, en Tucumán, en Santiago del Estero y en Catamarca. Forma rodales muy densos, sin dejar lugar a otras especies, que se ahogan por falta de luz, de agua y de nutrientes.

La plaga ya está ingresando a varios campos que, si no se toma medidas, serán colonizados en dos o tres años, como ocurrió en Cuba, donde miles de hectáreas de caña de azúcar debieron abandonarse.

En marzo está en pleno desarrollo. Entre abril y mayo iniciará su período de floración que dura cerca de dos meses. Se debe actuar antes ya que las flores cumplen su ciclo en forma progresiva, de tal modo que de abril a julio algunas plantas ya vuelcan sus semillas.

Es importante que instituciones nacionales y provinciales dedicadas al agro, facultades, escuelas, centros de productores de granos, de papa, de tabaco, de caña de azúcar, de cítricos, de berries y productores ganaderos, entre otros, tomen consciencia y luchen contra este enemigo silencioso que lentamente invadirá el campo.